EL CARACOL QUE HABITA A 400 metros
El nautilos es un animal marino poco conocido y de forma parecida a un caracol. Son moluscos muy antiguos que pertenecen al grupo de los cefalópodos, aunque éste no echa tinta como el calamar. Se considera al Nautilus un fósil viviente.
Mide unos 25 cm y posee noventa tentáculos con los que atrapa a su alimento, todo tipo de animales marinos, incluyendo peces, y que tritura posteriormente con su poderoso pico.
Los buceadores lo podemos ver en lugares e inmersiones muy concretos y generalmente no de forma espontánea. Tuvimos la suerte de verlo en un viaje que organizamos a Palau el año 2012. Los buceadores siempre tenemos la ilusión de ir tachando de nuestra lista imaginaria la vida marina que nos falta por ver. Al principio suelen ser animales grandes: tiburón martillo, tiburón ballena, mantas, tortugas, delfines… Nos volvemos más sibaritas y queremos ver animales más raros: manatíes, belugas. Luego comenzamos con “los bichitos” que hasta entonces casi no les habíamos hecho caso: nudibranquios, pulpo de anillos azules, caballitos de mar en todas sus variedades, etc. Y cuando llevas muchos años buceando, además de disfrutar del mar en todas sus variantes, viajas buscando lo que te hace ilusión ver y todavía no lo has logrado. Y con el viaje a Palau cumplimos un doble objetivo: ver Nautilus y nadar entre miles de medusas no urticantes.
He de reconocer que lo que a priori me parecía fascinante luego perdió parte de su encanto.
Los nautilus viven a profundidad y ascienden a zona poco profunda para poner sus huevos, que es la forma que tienen de reproducción, y a alimentarse por la noche. No nos lo habíamos planteado pero de alguna forma hay que hacerlos subir para que el turista-buceador lo contemple. Cuando llegamos a la zona de buceo observamos unas jaulas enormes llenas de pollo. Nos explicaron que lanzan esas jaulas la noche anterior para cazar a los nautilus y poderlos ascender. A continuación, te dan un nautilus a cada buceador con la misión de que lo cuides y que evites que cualquier depredador se lo coma. Y ahí te dejan una hora de inmersión con un “caracol”. A los diez minutos la mayoría de los buceadores ya se habían aburrido del bicho.
Observándolo de cerca, te percatas de que su concha es muy bonita y puede ser parte de su perdición porque los capturan para su venta. En la parte delantera vemos sus ojos saltones y los tentáculos y entre éstos, el sifón con el que se desplaza. A mi modo de ver resulta menos atractivo, pero juzgar vosotros viendo las fotos.
A nivel científico es un animal fascinante, la estructura de sus concha en compartimentos vacíos ha servido para copiar modelo para la fabricación de los submarinos (de ahí el nombre del submarino Nautilus de Julio Verne). Vive unos 20 años pero su reproducción es lenta porque no alcanza su madurez sexual hasta los 15.
Si no nos lo hemos cargado antes por esa afición a coleccionar que tenemos los humanos, aún podrás verlo en países lejanos al nuestro.