Morenas
Todos los buceadores hemos visto morenas a lo largo de nuestras inmersiones. Al principio con bastante temor porque siempre su carta de presentación es una boca llena de dientes afilados.
Cuando las conoces un poco más te percatas que realmente son animales bastante tímidos y que raramente te atacan sin motivo.
Sus dientes:
Su cuerpo alargado y su forma de moverse por el agua se parece al de la serpiente lo que provoca que infunda aún más temor. Pero no lo es.
Como hemos comentado, a la vista siempre deja ver una fila de dientes afilados pero lo que no vemos es que en su garganta hay otra mandíbula con sus correspondiente dientes. Este es el único animal conocido en el mundo con este diseño y los expertos están muy fascinados por la forma en que funciona.
Su boca permanece abierta para oxigenarse ya que las agallas se encuentran detrás de la cabeza.
Generalmente las vemos enrocadas, escondidas en huecos o cavidades. Suelen salir a la noche para alimentarse. Comen crustáceos, moluscos, pequeños pescados o cefalópodos.
Hay más de 200 especies de muy diversos colores y tamaños. Estas son algunas de las muchas morenas que hemos visto por el mundo:
En Maldivas nos las hemos encontrado de color amarillo y gran tamaño:
En la zona asiática hay unas morenas muy finas de color azul los machos adultos, amarillas las hembras y negras los juveniles, que rara vez se ven nadando:
También en ese trópico hay unas morenas de color blanco con motas.
o con anillos
Las del Mediterráneo y las pocas que se ven en el Cantábrico suelen ser oscuras con manchas amarillas, aunque en el último viaje al Mediterráneo Maltés vimos una morena marrón rosácea muy bonita, que introduce este artículo
En el Mar Rojo te puedes encontrar unas blancas diminutas pero muy irascibles y a su vez la morena más grande que te puedes imaginar, por algo se llaman morenas gigantes, pero super-mansas:
Les gusta que les limpien la comida que se queda entre los dientes por lo que es fácil encontrarlas rodeadas de gambas limpiadoras:
Suelen ser solitarias pero si no les queda otro remedio comparten casa con congrios o con otras morenas:
Continuaremos viajando y fotografiando más morenas para aumentar la colección.
