Todos habíamos oído hablar del calamar gigante y hemos visto películas de ciencia ficción en relación con el tema pero hasta ahora nunca se habían visto imágenes reales
Los científicos conocían fehacientemente su existencia aunque no se hubieran visto
Pertenece al género Architeuthidae, fue localizado el pasado verano a 630 metros de profundidad en el Océano Pacífico, al este de la isla nipona de Chichijima, a unos 1.000 kilómetros al sur de Tokio. Parece que el ejemplar medía unos tres metros, aunque había perdido sus dos tentáculos más prominentes, por lo que creen que pudo haber llegado a tener unos ocho metros de longitud. Posiblemente la pérdida de sus tentáculos se habrían producido en una pelea con algún cachalote.
La grabación se consiguió poniendo como cebo otro calamar más pequeño de un metro de largo. La cámara de alta definición capta de cerca los enormes ojos del animal y sus ventosas, de unos cinco centímetros de ancho. Se cree que tienen ojos muy grandes para poder localizar en la oscuridad a los cachalotes, sus principales depredadores.
La grabación se llevó a cabo tras 100 misiones a bordo de un pequeño sumergible tripulado por el investigador Kubodera, que lleva más de 10 años investigando a los calamares gigantes, y dos personas más. El investigador declaró que «brillaba y era hermoso». “Me emocioné mucho cuando lo vi de cerca, pero estaba seguro de encontrarlo porque habíamos investigado rigurosamente las áreas en que podríamos hallarlo, basándonos en los datos recogidos durante años”. El sumergible siguió luego al calamar hasta los 900 metros.
El documental se estrenará completo en Japón el 13 de enero y el 27 de enero será emitido en Estados Unidos.
A partir de estas imágenes los científicos esperan obtener más información sobre el comportamiento de este legendario animal.